La Segunda Guerra Mundial ha sido, hasta la fecha, el mayor conflicto bélico de la historia de la humanidad, tanto en términos de vidas humanas como en destrucción material. Una vez en el poder, Adolf Hitler tomó el camino hacia la guerra que, tras estallar en 1939, no tocaría a su fin hasta 1945. Una vez terminada, los vencedores se reunieron en diversas conferencias para preparar la paz y el nuevo orden mundial.
Después de escribir hace unos días sobre la deconstrucción del examen, mi intención con esta entrada es darle otra vuelca de tuerca a la evaluación para acercarme más a la evaluación continua. Los tres epígrafes de esta entrada siguen la misma filosofía: dar la oportunidad al alumnado de que, una vez realizada una prueba, tenga la posibilidad de mejorar la calificación que ha obtenido. Evidentemente, como se verá a continuación, eso está sujeto a una serie de condiciones. Además, no se aplica a todas las actividades del curso.
Conviene aclarar que, en ningún caso, se tratan de exámenes extraordinarios, sino de “segundas oportunidades” que modifican la nota media de los estudiantes en cualquier momento del curso. La recuperación existe al margen de este planteamiento, y a ella deberán presentarse en junio aquellos que no hayan logrado superar una o más evaluaciones.
Un proceso acumulativo para afianzar conceptos
A lo largo del curso académico, el alumnado ha de enfrentarse a nueve pruebas donde se evalúa su conocimiento de los términos de las distintas unidades didácticas. Previamente, como viene siendo habitual en las asignaturas que imparto, se les facilita la lista de esos conceptos, y se les informa de su valor en la nota: un 12%.
Ahora bien, lo previsto no es examinarse en cada unidad únicamente de los términos que le son propios, sino también de los de temáticas previamente dadas. Es decir, en la segunda prueba del curso también habrá conceptos de la primera, en la tercera de la primera y la segunda, en la cuarta de las tres anteriores y así hasta la novena unidad didáctica.
Mi objetivo con esta medida es doble: por un lado pretendo afianzar conocimientos básicos y por el otro poner fin a la costumbre de que un contenido dado se olvida después del examen. También es verdad que, entre el profesor y el alumnado, existe un acuerdo para que, al menos, el 40% de los términos sean del último tema explicado.
De cara a la cuestión que pretendo explicar en esta entrada, la acumulación de términos históricos también tiene consecuencias. De hecho, en una prueba de conceptos los estudiantes pueden modificar la nota obtenida en pruebas anteriores. Para que se me entienda bien, quizá lo mejor sea poner un ejemplo:
Imaginemos una persona que ha obtenido una calificación baja en la prueba de una unidad didáctica y que, semanas después, se enfrenta a la de otra. No sé, qué tal si la primera fue del tema tres y esta última del cinco, por ejemplo. Pues bien, si responde bien a un porcentaje alto de los conceptos de la tercera unidad, verá mejorada aquella nota.
Como es lógico, todo esto no se deja al azar, sino que está concretado de la siguiente manera:
Si el alumno responde correctamente a todos los conceptos propios de una unidad ya explicada, se le añaden dos puntos a la nota que tenía en la prueba de términos.
Si el alumno responde correctamente a dos tercios de los conceptos propios de una unidad ya explicada, se le añade un punto a la nota que tenía en la prueba de términos.
Si el alumnos responde correctamente a la mitad de los conceptos propios de una unidad ya explicada, se le añade medio punto a la nota que tenía en la prueba de términos. Ahora bien, para ello ha de tener, al menos, un siete en el examen que está realizando en ese momento.
Exámenes orales: elige tu propia aventura
Al igual que en el caso de los conceptos, los alumnos pueden modificar la nota que han obtenido en las pruebas orales. El sistema en este caso, todo hay que decirlo, es bastante menos complejo.
En el vídeo que elaboré para #AsíFlipeoEn3Minutos comentaba que cada estudiante se enfrenta a un examen oral cada dos semanas. Eso supone que al final de curso van a tener dieciocho oportunidades, mientras que las unidades didácticas, como ya comenté, son únicamente nueve.
Es decir, una vez hayan superado todas las pruebas previstas para un momento determinado del curso, podrán aprovechar los días sobrantes para mejorar las calificaciones obtenidas en los anteriores.
Rebobinando las respuestas de EdPuzzle
Aunque la visualización de los vídeos no entra del 80% de la nota que mi departamento marca para los exámenes –se sitúa dentro del otro 20%-, sí que es otro elemento clave en esta extraña evaluación continua que vengo explicando.
Todas y cada una de las explicaciones teóricas que tengo grabadas están subidas a EdPuzzle. De esta manera, gracias a las preguntas que introduzco en esta aplicación, cada vídeo me aporta una nota de todos los estudiantes.
Pues bien, existe la posibilidad de que, en cualquier momento del curso, los alumnos puedan mejorar la calificación que han obtenido en tres de ellos. Únicamente pongo una condición: deben haber hecho la tarea de vídeos dos semanas seguidas. Una vez cumplan eso, escogen tres explicaciones para que yo las desbloquee y ellos puedan volver a contestar.
¿De qué porcentaje de nota estamos hablando?
Este procedimiento con el que pretendo acercarme a la evaluación continua permite que la nota media del alumnado se actualice cada vez que mejoran su calificación en cualquiera de las tres pruebas descritas. Ahora bien, únicamente afecta a estas, por lo que cabe plantearse cuál es su peso real en la nota final.
En la entrada anterior señalé que los exámenes orales constituían el 20%, mientras que las pruebas de conceptos se quedaban un poco por debajo: un 12%. La cuestión de EdPuzzle es más compleja, pues no todas las unidades didácticas tienen la misma cantidad de vídeos. Sin embargo, suele situarse en torno al 3% en las tres evaluaciones.
En definitiva, este sistema de corrección de la nota afectaría a un 35% del total. Una cantidad que, si bien dista de ser decisiva, no es ni mucho menos despreciable.
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato la pintura de Botticelli. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.
Hace unas semanas, @eneko_fc inició un hilo en Twitter que ha generado un sinfín de reacciones y casi una decena de interesantes aportaciones en formato de vídeo. Con el hashtag #AsíFlipeoEn3Minutos, varios docentes nos lanzamos a explicar cómo programamos un curso siguiendo el modelo de aprendizaje inverso.
Aunque esta entrada recoge la lista de reproducción donde pueden consultarse esos vídeos, el verdadero objetivo de las siguientes líneas es profundizar en algunos aspectos mencionados en mi propia explicación sobre 1º de Bachillerato. Y, más en concreto, en la relación existente entre todas esas actividades, así como en su proceso de evaluación.
La deconstrucción del examen
Al término del pasado curso detecté dos problemas que tenían su origen en mi forma de evaluar la asignatura. El primero de ellos tenía que ver con lo poco que aprovechaban los alumnos es tiempo que se les daba para trabajar en el aula. Mientras que el otro guardaba relación con la tendencia a esforzarse únicamente en el estudio de los exámenes.
En su momento escribí una entrada en este blog en la que hablaba de la necesidad de deconstruir el examen. No me detendré a explicarlo de nuevo, pero sí a comentar cómo se ha plasmado esto en mi programación para este curso.
En lugar de realizar exámenes cada dos unidades didácticas, he recurrido a la fórmula de hacer una única prueba al final de cada trimestre. Ahora bien, con el fin de no darle un valor decisivo en la nota de la evaluación, supone únicamente el 26% de la misma.
A partir de ahí, teniendo en cuenta que el acuerdo de mi departamento establece que el 80% de la nota deben ser exámenes, me las ingenié para distribuir una gran cantidad de pequeñas pruebas a lo largo de cada trimestre. Con esto lo que pretendo alcanzar dos objetivos:
Que el trabajo del alumnado sea continuo y no fruto de la urgencia provocada por un examen puntual.
Hacerles ver que muchas pocas cosas hacen algo muy grande.
Un mini-examen semanal de carácter plural
La idea que tengo en mente es que mis alumnos, en cada unidad didáctica, se enfrentarán a una prueba de conceptos, un kahoot, un test y un pequeño examen oral. Evidentemente, cada uno de esos ejercicios se realiza distanciado varios días del anterior y del posterior. Eso permite que cada semana tengan que demostrar, en una prueba sencilla, sus conocimientos.
Otra ventaja que destacaría de ese sistema es la variedad de los sistemas que se utilizan. Al fin y al cabo, no es lo mismo enfrentarse a un examen oral que a uno escrito, a una prueba de conceptos que a una tipo test o a una actividad donde basta con acertar que a otra donde cuenta también la competencia.
Al final, ese conjunto de pequeñas pruebas completa el 80% de la nota dedicada a los exámenes de la siguiente manera:
– Cada uno de los tres exámenes de conceptos es un 4%.
– Cada uno de los tres test es un 6%.
– Cada uno de los cuatro kahoots es un 1%.
– Cada uno de los cuatro exámenes orales es un 5%.
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato la pintura de Masaccio. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato la pintura de Fra Angélico. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato la pintura de Giotto. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato el arte paleocristiano. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.
Aunque no he logrado terminarlo hasta ahora, lo cierto es que llevaba más de un año dándole vueltas a la idea de potenciar la gamificación en las Ciencias Sociales de 2º de ESO. Es cierto que ya venía realizando algunas actividades de este tipo, como La lucha por el trono o El juego de los 5 reinos. Sin embargo, no dejaban de ser actividades puntuales que distaban mucho de aglutinar el conjunto de la asignatura.
Medieval Times es, por tanto, el resultado de un año de recopilar ideas y siete días de trabajo intenso. Una labor que se basa en la necesidad urgente de subir un escalón en la motivación y el rendimiento escolar de mi alumnado. No en vano, considero que la gamificación puede ser la respuesta a algunos de los problemas que no he sabido solucionar bien el pasado curso.
Ahora bien, el juego que presento a continuación no es únicamente fruto de mi trabajo. Estoy en deuda con aquellos docentes que me han aportado ideas con su trabajo, y también con los que se han tomado la molestia de leer y corregir algunos aspectos del borrado que hice circular por algunos grupos de Telegram. Mención especial merece José Antonio Lucero y su proyecto gamificador La cuna de la Historia. Es evidente que esa experiencia es la base de Medieval Times, pues he hecho poco más que adaptarlo a mis circunstancias e introducir las modificaciones que me parecieron pertinentes.
Con el tiempo iré actualizado esta entrada con los nuevos materiales que vaya elaborando. Por el momento dejo los siguientes documentos:
Durante el curso 2014-2015 elaboré este Prezi para explicar en 2º de Bachillerato el arte de la Antigua Roma. Posteriormente he realizado algunos ajustes que me han servido para ponerlo de fondo en algunos de los vídeos sobre esa materia. Para consultar la presentación haz click aquí.