La consolidación del poder bolchevique


La guerra civil y el boicot internacional a la Rusia soviética no sólo influyeron en la orientación económica, sino también en la política del nuevo Estado.

La situación de excepción favoreció la centralización del poder en manos de los bolcheviques, siendo eliminadas otras opciones políticas.

Los bolcheviques representaban la fuerza más organizada y más capaz de conducir la guerra, mientras que el conflicto no dejaba otra alternativa, o se estaba con ellos o con los blancos. Ante tal disyuntiva, toda oposición política fue tildada de contrarrevolucionaria y, en función de ello, perseguida y eliminada.

En todo caso, el camino que acabaría por conducir hacia la constitución de un sistema de partido único se había iniciado en octubre de 1917, contribuyendo la guerra únicamente a acelerar el proceso. El gobierno provisional surgido de la Revolución de febrero de 1917 había fijado el 12 de noviembre como fecha de las elecciones a la Asamblea Constituyente.

Además, uno de los primeros actos del Consejo de Comisarios del Pueblo, que había accedido al poder tras la Revolución de octubre, fue ratificar la convocatoria.

Los resultados electorales, sin embargo, hicieron cambiar la posición de los bolcheviques: de los 707 miembros, los socialrevolucionarios obtuvieron 410, los bolcheviques 175, el partido kadet 17, los mencheviques 16 y los restantes grupos el resto (86).

Los bolcheviques sabían que nunca podrían aplicar su política si dependían de una Asamblea donde tenían tan pocos representantes. Por ello, cuando la Asamblea se reunió, los bolcheviques sometieron a votación una resolución en la cual esta quedaba subordinada a los soviets.

La proposición fue rechazada por la mayoría y, frente a esta situación, los bolcheviques no dejaron que la Asamblea se volviera a reunir. Con la disolución del Parlamento, los bolcheviques negaban el sufragio universal y las reglas de la democracia parlamentaria.
Se iniciaba así la construcción de un nuevo tipo de Estado, la “dictadura del proletariado”.

En este proceso de centralización del poder y censura democrática, los bolcheviques se sirvieron de la Cheka, dirigida por Feliks Dzerzhinski.

Esta policía política, fundada en 1917, se encargó de ir eliminando la oposición de anarquistas, socialrevolucionarios y mencheviques. A partir de 1922, la existencia legal de los partidos fue cada vez más ficticia: sus dirigentes eran frecuentemente detenidos, su prensa no podía salir a la calle y se prohibieron sus actos públicos.

Así mismo, la autonomía de los soviets era cada vez más reducida y su intervención en las decisiones políticas y económicas fue perdiendo fuerza. El Partido Bolchevique, llamado Comunista desde 1918, se fue convirtiendo en la única institución determinante de la vida política.

Progresivamente, Estado y Partido iban identificándose cada vez más.

Las voces que, entre los mismos bolcheviques, se alzaron contra esta situación fueron eliminadas o neutralizadas, consolidándose, poco a poco, un modelo de partido monolítico.

Una economía al servicio de la guerra


Como consecuencia del conflicto civil ruso, decayó la producción y aumentaron las dificultades de abastecimiento. El colapso económico obligó al gobierno a tomar una serie de medidas extraordinarias conocidas con el nombre de “comunismo de guerra”.

Así, ante el boicot capitalista, la inicial política bolchevique de respetar las actividades de la pequeña burguesía industrial fue sustituida por una aplicación generalizada de la expropiación.

Hacia finales de 1920, una gran parte de la producción industrial y del comercio había sido socializada.

A su vez, se restringió el papel de dinero en las relaciones económicas, pasando a primer término los intercambios en especie. También se hizo efectiva la nacionalización de la banca, del comercio interior y exterior, de los transportes y de las empresas con más de diez trabajadores.

Las condiciones de trabajo del proletario se hicieron muy duras y tanto la disciplina laboral como el carácter forzado del trabajo condujeron a una especie de militarización de la producción obrera.

Los derechos sindicales fueron restringidos y se prohibió el derecho a la huelga.

También la agricultura fue puesta al servicio de la guerra. El problema más grave era el abastecimiento de las ciudades, adonde no llegaban los productos agrícolas y cuando lo hacían era a unos precios exorbitantes.

Para resolver esta situación, se puso en práctica la requisa forzada de cosechas, el establecimiento de precios máximos y el impuesto en especie. No obstante, muchos ricos propietarios (kulaks) intentaron esquivar las requisas y vender su producción en el mercado negro.

El ascenso de Stalin

En 1917 se inició en Rusia un proceso revolucionario de importantes repercusiones políticas y económicas, tanto a nivel doméstico, como internacional. En febrero de ese año las huelgas, manifestaciones y protestas obligaron a la dinastía Romanov a abandonar el poder. El antiguo régimen zarista pasaba a convertirse entonces en una república de carácter democrático. Sin embargo, en octubre de 1917, los bolcheviques protagonizaron una insurrección de tipo comunista contra el gobierno provisional. Este vídeo explica la planificación y desarrollo de la Revolución de Octubre. Las restantes clases estarán dedicadas a una introducción al tema, las causas del fenómeno revolucionario, las fuerzas de oposición al zarismo, la Revolución de 1905, los sucesos de febrero de 1917, la evolución de la República Rusa y la Revolución de Octubre. Además, este repaso incluye vídeos sobre la construcción del régimen soviético, los Decretos de Octubre, la Guerra Civil, la NEP y la fundación de la URSS.

El Comunismo de Guerra


En 1917 se inició en Rusia un proceso revolucionario de importantes repercusiones políticas y económicas, tanto a nivel doméstico, como internacional. En febrero de ese año las huelgas, manifestaciones y protestas obligaron a la dinastía Romanov a abandonar el poder. El antiguo régimen zarista pasaba a convertirse entonces en una república de carácter democrático. Sin embargo, en octubre de 1917, los bolcheviques protagonizaron una insurrección de tipo comunista contra el gobierno provisional. Este vídeo explica la planificación y desarrollo de la Revolución de Octubre. Las restantes clases estarán dedicadas a una introducción al tema, las causas del fenómeno revolucionario, las fuerzas de oposición al zarismo, la Revolución de 1905, los sucesos de febrero de 1917, la evolución de la República Rusa y la Revolución de Octubre. Además, este repaso incluye vídeos sobre la construcción del régimen soviético, los Decretos de Octubre, la Guerra Civil, la NEP, la fundación de la URSS y el ascenso de Stalin.