Epílogo: empleo y desempleo de masas durante los años treinta


Finalizamos nuestro repaso a El desempleo de masas en la Gran Depresión. Palabras, imágenes y sonidos con el estudio de las fuentes utilizadas por el autor para elaborar el epílogo. En él, Díez Espinosa trata brevemente la evolución de la realidad hasta ahora descrita –el desempleo- a lo largo de los años treinta. La cita trascrita al inicio del capítulo nos da bastantes pistas sobre la temática del mismo: “Ahora queremos trabajar, y nuestro tazón de café con leche por la mañana. Que nos den eso, Hitler o el que sea, y nos daremos por contentos. La política no interesa a los obreros cuando tienen de qué comer y trabajo”.

Tres obras de literatura le sirven al autor para narrarnos la evolución del desempleo en la década de 1930: dos novelas –Journal d`Allemagne, de D. Rougemont, y Adiós a Berlín, de Christopher Isherwood – y una obra de teatro –Terror y miseria en el Tercer Reich, de B. Brecht-.

En lo que a estudios se refiere, Díez Espinosa recurre a The Condition of the Working Class in Britain (A. Hult), Anotaciones sobre Hitler (Sebastian Haffner), Hitler. Reden und Proklamationen, 1932-1945 (M. Domarus), El laberinto alemán. Democracias y Dictaduras, 1918-2000 (José Ramón Díez Espinosa), Bread and Work. The experience of unemployment (Matt Perry), Men without work. A report made to the Pilgrim Trust, The Long Week-End: a social History of Great Britain 1918-1939 (R. Graves y A Hodge), Roges, boffons & Statesman (G. R. Newell), Mobilizing the powerless: collective protest action of the Unemployed in the interwar period (A. Richards), y White Collar Workers in America 1890-1940 (J. Kocka). Por último, destacar el gráfico de la página 274 sobre la evolución del desempleo de masas durante los años treinta en Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos.

Bibliografía:

[1] El desempleo de masas en la Gran Depresión. Palabras, imágenes y sonidos; José Ramón Díez Espinosa – Valladolid – Universidad – 2006.

Pardos y rojos se disputan la última esperanza de Alemania


El desempleo de masas en Alemania estuvo estrechamente vinculado al auge electoral de los grupos antisistema a principios de los años treinta. Por esa razón, no ha de extrañarnos que buena parte de la estrategia política de estos girase en torno al citado problema social. Así nos narra Díez Espinosa este fenómeno: “El cambio político requiere conquistar el voto de los desempleados (2 millones en 1929, 3 millones en 1930, 4,5 millones en 1931, 6 millones en marzo de 1932), de sus familiares y, en general, de cuantos ciudadanos se sienten amenazados por el desempleo. Las formaciones antisistema son conscientes del potencial revolucionario de la crisis económica y orientan a tal fin la estrategia”.

No obstante, como bien indica el autor en esta y otras de sus obras –El laberinto alemán y Sociedad y cultura en la República de Weimar. El fracaso de una ilusión– la crisis no fue la única causa del derrumbamiento republicano. Coincide con Sebastián Haffner al afirmar que el constructo político de Weimar nació incapaz de arraigar en la conciencia de los alemanes: era una república sin republicanos. Esto explica porque el modelo democrático-liberal cayó en Alemania mientras se mantuvo en otras naciones –Estado Unidos y Gran Bretaña- con problemas de desempleo similares o mayores. En esos lugares el sistema político había echado raíces; se planteaban cambios en los gobiernos, pero nunca de modelo estatal.

Díez Espinosa comienza su estudio sobre el desempleo de masas y los grupos antisistema en Alemania citando algunos estudios de carácter sociológico, histórico y económico: Los parados de Marienthal (Paul Lazarsfield, Marie Jahoda y Hans Zeisel) Bread and Work. The experience of unemployment (Matt Perry), La Gran Depresión (Jean Heffer), Sociedad y cultura en la República de Weimar. El fracaso de una ilusión (José Ramón Díez Espinosa), Wirtschaftliche Depresion und Politischer Radikalismus (H. Bennecke), Unemployment and Solidarity: the German Experience 1929-33 (Dick Geary), Los fascismos (Thierry Buron y Pascal Gauchon ), y Empleo y desempleo. Un análisis socio-psicológico (Marie Jahoda). Después de estos estudios, el autor se sirve de las obras literarias para continuar con su exposición: La peste parda, de Daniel Guérin; Una juventud alemana, de Golo Mann; Berlin Alexanderplatz, de Alfred Döblin; Mr. Norris cambia de tren, de Christopher Isherwood; Un sí menor y un NO mayor, Georg Grosz; La escritura invisible, de Arthur Koestler; ¿Y ahora qué?, de Hans Fallada; Von drei Millionen drei, de Leonhard Frank; La muchacha de seda artificial, de Irmgard Keun; Fabian, Historia de un moralista, de Erich Kästner.

A lo largo del espacio dedicado a Alemania encontramos también referencias al cine –Kuhle Wampe, de Slatan Dudow- y a la música –Horst Wessel Lied por la parte nacionalsocialista, y Das Solidaritätslied por el bando comunista-. Además, en las páginas 231 y 232 encontramos, respectivamente, un cuadro dedicado a los resultados electorales del KPD entre 1928 y 1933 (cuadro 24), y otro de idéntica temática sobre el NSDAP.

Bibliografía:

[1] El desempleo de masas en la Gran Depresión. Palabras, imágenes y sonidos; José Ramón Díez Espinosa – Valladolid – Universidad – 2006.

Un techo y cuatro paredes donde cobijarse


Una vez agotado el ámbito de la alimentación, el libro aborda otro de los aspectos fundamentales para las personas de la época: ¿dónde dormir? La vivienda, y más en concreto las dificultades económicas de los desempleados para costearse una, es la cuestión que trata Díez Espinosa en el último epígrafe de este tercer capítulo. Así nos narra el autor las dificultades de algunos personajes de El día del juicio en torno a esta cuestión: “Además, los Trent no eran los únicos inquilinos que habían dejado de pagarle la renta. También los O´Connell, del tercer piso, estaban en dificultades y llevaban ya tres meses sin pagar un centavo a Lonigan. El señor O´Connell había sido siempre un hombre serio y puntual en los pagos, pero las cosas iban mal en sus negocios y había perdido casi todos sus bienes (…) Por ingrata que fuera la decisión, Martin Lonigan debía comunicar a los Trent y a los O´Connell que abandonaran inmediatamente el inmueble”.

Las páginas dedicadas al “¿dónde dormir?” están divididas en tres apartados: Entre el desahucio y el hacinamiento; La arquitectura del desempleo: colonias, campamentos y hoovervilles; y Las rutas de los sin techo. En el segundo de ellos encontramos un cuadro de George Orwell con algunas anotaciones relativas a viviendas del norte de Inglaterra. En concreto son los hogares que se describen son los siguientes: casa en Greenough´s Row (Wigan), casa en la calle Peel (Barnsley), casa en Thomas Street (Sheffield), y casa en Mapplewell (pequeño pueblo minero). En el epígrafe dedicado a los sin techo encontramos una fotografía con el siguiente pie de foto: “Una cuerda garantiza la estabilidad y el descanso nocturno de los desempleados”. En ella podemos ver a cinco hombres dormidos cuyas respectivas cabezas descansan, dependiendo del caso, en el hombro de un compañero o en una cuerda.

En el ámbito literario, hemos de destacar las referencias a El día del juicio, de James T. Farrell; El camino a Wigan Pier y Sin blanca en París y Londres, de George Orwell; Adios a Berlín, de Christopher Isherwood; ¿Y ahora qué?, de Hans Fallada; La peste parda. Viaje por la Alemania nazi, de Daniel Guérin; La muchacha de seda artificial, de Irmgard Keun; Las uvas de la ira, de John Steinbeck; Los buenos camaradas, de John Boynton Priestley; y Waiting for Nothing, de Tom Kromer. Tras esta enumeración de obras y autores, coincidirán conmigo en calificar de sorprendente el control que el autor tiene sobre el mundo de la novela de entreguerras. Sin embargo, la riqueza documental de estas páginas no termina ahí: abundan las referencias a estudios teóricos y a obras cinematográficas. Dentro del primer grupo nos encontramos con The Tenant Movemente in New Cork City 1904-1984, trabajo de R. Lawson publicado en Rutgers University Press; The Tenements of Chicago 1908-1935, de Edith Abbot y Sophonisba Preston Breckinridge para la University of Chicago Press; La Gran Depresión, de Jen Heffer; La crise des societés impériales. Allemagne, France, Grande-Bretagne 1900-1940 de Christophe Charle; Von drei Millionen drei; y La democracia en Alemania. Historia y perspectivas. En lo que se refiere al cine, cabe destacar Our Daily Bread de King Vidor, y Kuhle Wampe de Slatan Dudow.

Bibliografía:

[1] El desempleo de masas en la Gran Depresión. Palabras, imágenes y sonidos; José Ramón Díez Espinosa – Valladolid – Universidad – 2006.

Realidad y representación del desempleo de masas durante la Gran Depresión I


“El desempleo de masas, enfermedad social de Europa y América”; y sobre este texto una fotografía que ocupa casi toda la página. En ella podemos ver una larga cola de desempleados a la puerta de una fábrica con la esperanza de ser contratados. La fila carece de orden. Se trata de una informe masa de hombres –todos con su reglamentario sombrero- que, en algunos puntos, parecen formar pequeñas tertulias con las que amenizar la espera. Sin embargo, esos grupos de personas que conversan desaparecen en los puestos más avanzados. Allí un guardia de uniforme parece poner orden con su mera presencia. De él en adelante los desempleados caminan en fila de uno para dirigirse al puesto de contratación. Nos hayamos en la página veinte, al inicio del capítulo. Más adelante –en la cuarenta y cinco- el libro nos ofrece una escena similar. El pie de foto es el siguiente: “Cientos de desempleados hacen cola en una oficina de contratación en Clydebank, Escocia”.

Este primer capítulo se divide en tres epígrafes. El primero está dedicado a la Europa continental –Hombrecillo, ¿y ahora qué?-, el segundo a Gran Bretaña –Sin blanca en Londres-, y el último a los Estados Unidos –El día del juicio-. Para abordar la cuestión europea nos introducimos en la vida de Hans Pinneberg, protagonista de la novela de H. Fallada Hobrecillo, ¿y ahora qué? (1932). Sin embargo, no va a ser este el único personaje literario utilizado por Díez Espinosa para mostrarnos la realidad del desempleo. Gisela –Gilgi, una de nosotras (1931)-, y Doris –La muchacha de la seda artificial (1932)- son dos figuras femeninas de la Gran Depresión cuya historia nos narra I. Keun. También nos encontramos en el mundo de desempleo a los personajes de L. Frank –Tres entre tres millones (1932)- y E. Kästner –Fabian, historia de un moralista (1931)-. Sin olvidar las descripciones de viajeros como C. Isherwood y D. Guérin: “cansados de estar mano sobre mano en su barrio triste, de ser una carga para sus padres, salen en primavera y van dando tumbos hasta el final del otoño. Algunos deambulan así desde hace varios años, sin norte, viviendo de limosnas, pernoctando en los asilos o en los establos” (D. Guérin. Antes de la catástrofe).

Díez Espinosa dedica también es este primer epígrafe una mención a los largometrajes de la época. Kuhle Wampe, del director búlgaro S. Dudow, es la película elegida para mostrarnos cómo percibían el desempleo los profesionales del mundo del cine. En lo que se refiere a la música dos son las letras transcritas en las páginas del libro: La canción del desempleado compuesta por H. Eisler y D. Weber en 1929, y Sombrío domingo obra de R. Seress y L. Jávor que vio la luz en 1932. Sobra decir que el pesimismo y la tristeza constituyen un elemento común en todas estas expresiones artísticas.

Todo este material compuesto por palabras, imágenes y sonidos, se vertebra a partir de un esquema fácilmente perceptible. En los primeros párrafos el autor nos de una visión general del desempleo en el continente europeo. Posteriormente nos introduce, con más o menos detalle en función de su peso nacional, en la realidad de cada país. La situación de Alemania, Austria, Hungría, Checoslovaquia, Polonia, Francia, Holanda y Bélgica, desfila ante los ojos de lector en forma de texto y mediante cuadros estadísticos. De estos últimos encontramos dos en las páginas veintidós y treinta y cinco del primer capítulo: el desempleo en Alemania durante la Depresión (1930-1933), y el desempleo en algunos países durante la Depresión.

Bibliografía:

[1] El desempleo de masas en la Gran Depresión. Palabras, imágenes y sonidos; José Ramón Díez Espinosa – Valladolid – Universidad – 2006.