A mediados del siglo XVIII se inició en Gran Bretaña un intenso proceso de industrialización que llevó a la transformación radical de la forma de producir, distribuir y comercializar bienes y servicios. Posteriormente, esos cambios se extendieron al continente europeo, así como a otros territorios fuera del Viejo Mundo, como los EE.UU. o Japón. En esta clase se explican las principales características de la revolución industrial: las nuevas fuentes de energía, las innovaciones tecnológicas, el desarrollo agrario, la aparición de la fábrica y los cambios en el ámbito de los transportes. Los otros vídeos están dedicados al concepto y consecuencias de la industrialización, los inicios de ese proceso en Gran Bretaña, su expansión al Continente, la transición demográfica, la evolución económica occidental hasta 1870, la Larga Depresión de esa década, los planteamientos del liberalismo económico y los cambios económicos de finales del XIX.