La historia se hace con documentos

Es que el conocimiento del pasado humano no se limita a los meros datos propiamente humanos de ese pasado. El hombre no vive aislado, como en la campana de una máquina neumática; es inseparable de «medio ambiente» en que se halla inmerso y que es algo de gran complejidad: psíquico, químico, biológico, etcétera, tanto como humano. Su historia incorporará a su conocimiento los fenómenos naturales que, formando parte de ese medio, han representado un papel en su pasado: la peste de Atenas en la guerra del Peloponeso, la ola de frío que permitió a los alanos y vándalos pasar el Rin helado a la altura de Colonia el 1 de enero del 407, etcétera.

Henri-Irénée Marrou, El conocimiento histórico, p. 68.