…se señalaba que Croacia seguiría integrada en Yugoslavia «hasta un nuevo acuerdo de las repúblicas yugoslavas o hasta que el parlamento decida otra cosa». Los dirigentes croatas se adscribían a un proceso paulatino y asentado en las negociaciones -lo que llamaban una «disociación»-, frente a la franca «separación» por la que parecían haber optado los eslovenos.
José Carlos Lechado y Carlos Taibo, Los conflictos yugoslavos, p. 64.